Vivir y existir no es necesariamente lo mismo, es más tu puedes vivir y no existir pero no puedes existir sin vivir, y no me refiero a las cosas inanimadas, me refiero a cada ‘persona’, un ejemplo muy sencillo es que si yo ‘vivo’ disfruto cada momento, soy feliz pero en algunos momentos tiende uno a deprimirse, aburrirse y arrepentirse mientras que si yo decido ‘existir’ disfruto cada momento, soy feliz, me asombro y lo más importante, no me arrepiento. Según muchos filósofos solo tenemos una limitada toma de decisiones (es absurdo perder tiempo en decisiones para luego arrepentirnos). Pero las decisiones que realmente importan tales como: ¿Quién decidió nacer?, ¿Quién decidió el aspecto que iba a tener?, ¿Quién decide cuándo va a morir? Esas preguntas importantes nunca nos las hicimos, simplemente han sido impuestas pero hay algo bueno, hay decisiones que tomamos por nuestra cuenta, son tan básicas pero realmente importantes, por ejemplo: ¿Cómo me visto ahora?, ¿M...
La felicidad puede tener un poco de anomía, pero tendra mucha sinceridad. Ya que la sinceridad es felicidad.